martes, 1 de febrero de 2011

Luidl, Philipp. Tipografía básica. Campgrafic. Valencia, 2004.

Aquí se va indicar de forma clara y pedagógica todo aquello que debe tenerse en cuenta a la hora de preparar una página. Desde los blancos necesarios, hasta los filetes, pasando por las proporciones o el tipo de letra más ajustado a cada necesidad. Punto por punto, letra por letra y con multitud de ejemplos, se ofrece soluciones a cada uno de de los problemas con que podemos enfrentarnos en la composición.

Recomendado por Mónica Puigferrat

5 comentarios:

  1. A medida que va pasando el tiempo la forma de medición de un cuerpo va cambiando para darle sencillez y uniformidad.
    Un texto debe ser legible para su comprensión, dependiendo de lo que se leerá debe de llevar el espacio adecuado, se deben de tomar aspectos como la distancia a la que el lector lo leerá o cuanto tiempo le tomara leer el texto, todo esto debe de tomarse en cuenta para la comodidad, ya que debe de ser agradable a la vista.

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  2. Conforme pasaba el tiempo y a partir de la necesidad por estandarizar el tamaño de las tipografías, se llega a la conclusión que las fuentes se miden a partir de “puntos”, los cuales nos ayudan a reconocer o reflexionar sobre los tamaños adecuados que deben utilizarse para una composición., es decir, tomar en cuenta tanto la distancia en que se leen los textos y el tiempo en que se leen los mismos.

    Para la selección de un texto de consulta por lo general se utilizan tamaños de 4p a 8p., dado que solo necesitamos poco tiempo para leerlo, para un texto de lectura se utilizan tamaños de 9p a 12p., ya que debemos ayudar al lector a que su lectura sea mas cómoda y que sea agradable a la vista, tomando en cuenta que se requiere de más tiempo para leerse y comprender el contenido, por último tenemos el tamaño de visión, el cual nos ayuda a que nuestros textos sean leídos a cierta distancia y en lapsos cortos de tiempo, para este tamaño podríamos recurrir a los 14p o más.

    Este análisis nos lleva a poner mayor atención para elegir una buena fuente tipográfica en el momento de hacer alguna composición, considerando tanto lo que vemos por obviedad y lo que dejamos de ver por costumbre., recordando que todo es un mensaje visual entre el contraste de los blancos del papel y el color de los textos, lo cual puede enriquecer nuestra composición o arruinarla por completo.

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  3. Esta lectura complementa a la otra. Ya que vemos el diseño de la tipografía hay que cuidar el tamaño de las letras, el espaciado entre ellas, las pulsaciones de cada línea y el interlineado (espacio existente entre las líneas). Hay que analizar para qué medio se quiere, porque se lee, además de libros, en periódico, mensajes cortos, anuncios, internet, libros digitales, etc, y facilitar la lectura, porque cada vez la gente lee menos y los textos deben ser muy cortos. Estos son los elementos que debemos de cuidar para tener un texto legible y a la vez llamativo.

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  4. El texto nos deja claro, técnicamente, como se ha ido adaptando la medición de las fuentes a lo largo de la historia. Ejemplifica su evolución así como las mejores opciones de tamaño en letra de acuerdo al material donde se utilizará, clasificándola en consulta, lectura o visión. No es lo mismo el tamaño que debe utilizarse en un encabezado donde la lectura es rápida, que el tamaño que se utiliza en el texto de un libro, revista y hasta periódico, donde la atención debe ser mayor. Otro punto que toca la lectura es la forma en que se mide la tipografía, tomando en cuenta altas y bajas ascendentes y descendentes.

    Sin duda el texto resulta sumamente interesante para todo el que esté involucrado en la creación y análisis de fuentes, pero además revelador para aquellos que apenas nos estamos involucrando en el tema.

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  5. Los sistemas de medición de la tipografía han pasado por varias etapas: anteriormente se medían en cíceros y en la actualidad se miden en puntos.
    La medida adecuada para un texto es determinada por la distancia a la que se leerá el texto y el tiempo de lectura que requerirá el lector, formando así 3 grupos básicos:
    El tamaño de consulta que son textos de consulta rápida para encontrar alguna sección en especial dentro del texto.
    El tamaño de lectura que son los de mayor extensión y deben favorecer la comprensión y comodidad por el largo tiempo de lectura que implican.
    El tamaño de visión que son los que se leen a cierta distancia, para ubicar rápidamente un documento.
    La medición del cuerpo de una letra se hace desde el extremo superior hasta el extremo inferior de una palabra, incluyendo los caracteres ascendentes y descendentes. A esto se le conoce como altura vertical.
    Claudia Rivas

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